La creación de empresas por emprendedores con ideas innovadoras será la alternativa en 2013 para intentar salir de la recesión económica con más puestos de trabajo en España, país que tiene crecientes expectativas sobre la gestión de la crisis en la zona euro y negativas proyecciones de crecimiento.
Las previsiones de España para 2013 estiman un crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) de -0.5 por ciento; el Fondo Monetario Internacional lo sitúa en -1.3 por ciento y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) en -1.4 por ciento.
Para el director de Economía del Instituto de Empresa (IE Business School), Rafael Pampillón, 2013 “será un año que seguirá el mismo proceso que 2012” en cuanto a recesión y desempleo, aunque nadie sabe a ciencia cierta lo que pasará.
En entrevista con Notimex consideró que en materia de desempleo “podría ser uno de los peores años, porque se seguirán perdiendo plazas y es posible que en 2013 aumente la creación de nuevas empresas. En este momento cierran más de las que se crean”.
La tasa de desempleo que prevé el gobierno español para 2013 es de 24.3 por ciento de la población económicamente activa; la estimación de la OCDE es de 26.9 por ciento y de 25.1 por ciento del FMI, frente a un 24.9 o 25.0 en promedio de las tres partes para 2012.
El experto refirió que ciertamente en 2013 podría haber más pérdida de empleos y lamentó que el único sector con mejoras actualmente, que es el exportador, “no sea absorbente en creación de empleos y solo lo sea en capital y tecnología”.
“Esto tardará muchos años en recomponerse. Lo que podría haber en 2013 es más creación de empresas, más financiamiento a emprendedores y que el sector exportador siga aumentando sus márgenes y permita recuperar beneficios”, apuntó.
Expuso que de hecho, el sector exportador, que algunos años de la crisis económica ha llegado a crecer hasta 15 por ciento, es lo que ha permitido una mejora en el desequilibrio exterior de la economía española y le ayuda a ser más competitiva.
“En definitiva, el año que viene el crecimiento sería negativo como en este año, pero al final de año ya podría ser positivo y esperemos que en 2014 empezará a crearse empleo”, aseveró.
Recalcó que mientras en 2007 se llegó al máximo nivel de empleo, con más de 20 millones de personas en puestos de trabajo, la cifra contrasta con los 12 millones de 1996 y los actuales casi 17 millones en el desempleo.
Enfatizó que aunque las exportaciones no son una fuente generadora de muchos empleos, la mejora en 2013 podría generar mayor inversión en busca de más competitividad y con ello más puestos de trabajo.
Apuntó que más allá de 2013 “no se sabe cómo le vaya a ir en general a la economía; el peso del desempleo no es fácil resolver”.
Consideró que el margen de maniobra en políticas de crecimiento, lo podría tener el financiamiento en nuevas empresas, iniciativas innovadoras y emprendimiento, lo que “podría no ser caro y en lo que se tiene que hacer un esfuerzo para retener gente joven y formada en España”.
El profesor del IE destacó que en cuanto a los factores externos, está la gestión de la crisis en la zona euro, algo que “es importante para España por ser parte del grupo y tener esta moneda, y de lo que pase en Estados Unidos con el precipicio fiscal”.
Sobre los problemas de deuda de España, remarcó que en caso de prolongarse más tiempo un déficit público elevado, el mantenimiento de la deuda podría ser más elevado y en ese caso el país necesitaría pedir al Banco Central Europeo (BCE) que intervenga”.
“Si el BCE actúa a petición, comprando deuda en el mercado secundario, se bajaría la prima de riesgo y el déficit público sería menos problemático. Es algo que depende de nosotros, pero también de Alemania (reticente a que se compre esa deuda)”, mencionó.
Agregó que para las decisiones que en esa materia se tomen en 2013, será muy importante el resultado de las elecciones generales en Alemania e Italia, países claves en la zona euro.
Fuente: Página web La Opinión.
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