Sin finanzas sanas no hay empresa. Sacar adelante tu proyecto necesita control de gastos e ingresos, cuidado de los plazos de cobro y reserva de capital en efectivo.
"La contabilidad es una parte esencial en la vida de una compañía y también una de las que más descuidan los empresarios" advierte Iosu Buenetxea, que aprovechó esta realidad y sus conocimientos en aplicaciones de gestión para crear hace un año MySaaSPlace, un negocio que ofrece soluciones de facturación y contabilidad para pymes alojadas en la nube. Sin una buena salud financiera y sin planes de futuro viables y factibles, la desaparición de una empresa es más que probable. Para Alejandro Suárez, business angel y vicepresidente de la Asociación de Inversores y Empresarios de Internet (AIEI) "todo emprendedor debe ser consciente de que tener definido el producto o servicio que queremos comercializar es sólo una parte del proyecto empresarial. Para su despegue y desarrollo es vital elaborar un plan financiero que cuantifique en dinero la calidad de la idea de negocio y qué cantidad se necesitará para cada etapa".
"La contabilidad es una parte esencial en la vida de una compañía y también una de las que más descuidan los empresarios" advierte Iosu Buenetxea, que aprovechó esta realidad y sus conocimientos en aplicaciones de gestión para crear hace un año MySaaSPlace, un negocio que ofrece soluciones de facturación y contabilidad para pymes alojadas en la nube. Sin una buena salud financiera y sin planes de futuro viables y factibles, la desaparición de una empresa es más que probable. Para Alejandro Suárez, business angel y vicepresidente de la Asociación de Inversores y Empresarios de Internet (AIEI) "todo emprendedor debe ser consciente de que tener definido el producto o servicio que queremos comercializar es sólo una parte del proyecto empresarial. Para su despegue y desarrollo es vital elaborar un plan financiero que cuantifique en dinero la calidad de la idea de negocio y qué cantidad se necesitará para cada etapa".
La sana administración de una empresa requiere que una serie de decisiones y actuaciones sobre el manejo del dinero se conviertan en hábitos. Desde las Cámaras de Comercio recuerdan que un punto esencial es asignar salarios justos. Incluidos los socios fundadores. Éstos deben considerarse un miembro más de la firma y fijar una retribución acorde a su aportación.
El equilibrio entre las entradas y salidas de dinero es otro aspecto que se debe cuidar. En general, sólo existen dos formas de que entre capital en una empresa: aportación monetaria a través de inversores, instituciones y préstamos o los ingresos derivados de las ventas. Según Jordi Vinaixa, director académico del Instituto de Iniciativa Emprendedora de Esade, "éstos últimos son los que hacen verdaderamente rentable y saludable a un negocio. Por tanto, es fundamental que el emprendedor sepa generar ventas". El profesor de Esade explica que, en ocasiones, esto supondrá ser práctico y buscar duplicidad de ingresos. "Por ejemplo, si una firma de biotecnología quiere desarrollar un producto para el que necesita tiempo de investigación, puede obtener los ingresos inmediatos que necesita produciendo y comercializando otros productos de los que sabe que hay una demanda real en el mercado".
En cuanto a las salidas de capital suelen estar compuestas por costes derivados de compra de materias primas, gastos de operaciones (salarios, alquileres, renta...) e inversiones (maquinaria, mobiliario, publicidad). Por consiguiente, es primordial estudiar muy bien a qué destinamos el dinero y si realmente es necesario.
Alejandro Suárez también insiste en que "para que un negocio sea viable hay que ser exigente con los pagos de nuestros clientes y proveedores". Porque una cosa es dar crédito y otra es fiar. Si tenemos la intención de dar crédito, antes debemos comprobar las posibilidades de impago y si podemos asumir ese riesgo. En cualquier caso, es recomendable contar con alguien que se encargue de exigir los cobros y darle las armas de trabajo, como pagarés firmados, acuses de recibo, contratos, etcétera.
Desde la Confederación Española de Jóvenes Empresarios (Ceaje), su presidente, David Alva, señala que "siempre hay que tener una reserva de capital en efectivo para hacer frente a posibles imprevistos (que siempre llegan)". Aunque la cantidad variará dependiendo del tamaño de la empresa y del sector, es conveniente tener como mínimo el equivalente a tres meses de gastos de operaciones.
El equilibrio entre las entradas y salidas de dinero es otro aspecto que se debe cuidar. En general, sólo existen dos formas de que entre capital en una empresa: aportación monetaria a través de inversores, instituciones y préstamos o los ingresos derivados de las ventas. Según Jordi Vinaixa, director académico del Instituto de Iniciativa Emprendedora de Esade, "éstos últimos son los que hacen verdaderamente rentable y saludable a un negocio. Por tanto, es fundamental que el emprendedor sepa generar ventas". El profesor de Esade explica que, en ocasiones, esto supondrá ser práctico y buscar duplicidad de ingresos. "Por ejemplo, si una firma de biotecnología quiere desarrollar un producto para el que necesita tiempo de investigación, puede obtener los ingresos inmediatos que necesita produciendo y comercializando otros productos de los que sabe que hay una demanda real en el mercado".
En cuanto a las salidas de capital suelen estar compuestas por costes derivados de compra de materias primas, gastos de operaciones (salarios, alquileres, renta...) e inversiones (maquinaria, mobiliario, publicidad). Por consiguiente, es primordial estudiar muy bien a qué destinamos el dinero y si realmente es necesario.
Alejandro Suárez también insiste en que "para que un negocio sea viable hay que ser exigente con los pagos de nuestros clientes y proveedores". Porque una cosa es dar crédito y otra es fiar. Si tenemos la intención de dar crédito, antes debemos comprobar las posibilidades de impago y si podemos asumir ese riesgo. En cualquier caso, es recomendable contar con alguien que se encargue de exigir los cobros y darle las armas de trabajo, como pagarés firmados, acuses de recibo, contratos, etcétera.
Desde la Confederación Española de Jóvenes Empresarios (Ceaje), su presidente, David Alva, señala que "siempre hay que tener una reserva de capital en efectivo para hacer frente a posibles imprevistos (que siempre llegan)". Aunque la cantidad variará dependiendo del tamaño de la empresa y del sector, es conveniente tener como mínimo el equivalente a tres meses de gastos de operaciones.
Claves para crecer como empresa
Financiación. Hay que tener en cuenta las restricciones en el sistema financiero tradicional. Además de saber muy bien hasta dónde llegan los recursos propios hay que conocer las ayudas y políticas públicas.
Ampliación de capital. Fomenta la colaboración con otras empresas. El acceso al capital es cada vez más complicado. Por eso, en la etapa de consolidación es importante establecer relaciones sólidas con otras firmas que te apoyen para seguir creciendo.
Expansión. La evolución natural de una empresa debe contemplar la ampliación de mercados y, por supuesto, el internacional es uno de los que mayores ingresos puede reportarte.
Fusión. En contextos económicos difíciles hay que contemplar todas las posibilidades y la unión de proyectos y sinergias es una buena opción.
Fuente: Página web Expansión.
Ampliación de capital. Fomenta la colaboración con otras empresas. El acceso al capital es cada vez más complicado. Por eso, en la etapa de consolidación es importante establecer relaciones sólidas con otras firmas que te apoyen para seguir creciendo.
Expansión. La evolución natural de una empresa debe contemplar la ampliación de mercados y, por supuesto, el internacional es uno de los que mayores ingresos puede reportarte.
Fusión. En contextos económicos difíciles hay que contemplar todas las posibilidades y la unión de proyectos y sinergias es una buena opción.
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