Que las redes sociales están en pleno auge no se le escapa a nadie, y mucho menos, a las empresas, que ven en ellas todo un filón para mejorar la comunicación con sus clientes, accionistas y público objetivo. Esto es al menos lo que se desprende de un estudio de la consultora de comunicación y relaciones públicas Burson-Marsteller, que afirma que la gran mayoría de las empresas más importantes del mundo utilizan habitualmente, al menos, una de estas plataformas.
De acuerdo con el III Estudio «Global Social Media Check-up», 87 de las 100 primeras empresas que forman el prestigioso índice Fortune Global utilizan Facebook, Twitter o Yotube de forma habitual para conectar con inversores y clientes. Y las cifras son impresionantes: el 82 por ciento tienen, al menos, una cuenta de Twitter, y cada compañía ha sido mencionada una media de 55.970 veces en esta red social; la utilización corporativa de Youtube ha aumentado un 24% desde el año pasado... En Facebook, la media de 'me gusta' por cada página corporativa ha aumentado un 275 por ciento desde 2010, hasta los 152.646 'me gusta' en 2012.
Este incremento se explica por las ventajas que ofrecen las redes sociales a las compañías. El doctor en Ciencias de la Información por la Universidad Complutense y experto en comunicación corporativa Juan Pedro Molina Cañabate afirma que estas plataformas «permiten conocer directamente a los públicos objetivo y saber sus necesidades, tener un retorno de la información casi inmediato y saber si los mensajes que la empresa emite han calado en el público y hasta dónde». En la misma línea se expresa el director ejecutivo de Burson-Marsteller, Mark Penn, destaca que «la gente quiere interactuar con las compañías, y estas plataformas son el puente directo al corazón de estas organizaciones»
Para Cañabate, es importante para las empresas estar en estas plataformas ya que «son ellas mismas quiénes tienen que ser responsables y garantes de su propia reputación online». El doctor añade que «deben (y necesitan) saber qué imagen percibe el público de ellas. Además, las plataformas 2.0 pueden detectar indicios de crisis de forma inmediata y ayudan a su resolución».
USAR EL SENTIDO COMÚN
La empresa que desee introducirse con éxito en el mundillo de las redes sociales debe seguir, según Cañabate, una estrategia en tres pasos: «En primer lugar, dejar esta función en manos de profesionales que tengan una solvencia probada en Comunicación. Es imperdonable dejar tu reputación digital en manos de gente no-profesional a las que se les paga un puñado de euros porque se cree que esto de las redes sociales es algo fácil. Las redes sociales son sólo un camino. La Comunicación, con mayúsculas, es el gran viaje, en donde se juega mucho. La Comunicación siempre tiene que estar en manos de profesionales».
En segundo lugar, el profesor recomienda «no entrar en las redes sociales como un elefante en una cacharrería, sino con sentido común», ya que «las redes sociales están ideadas para facilitarnos la vida, no para amargárnosla. Debemos ver qué herramientas encajan mejor con nuestro perfil, con la imagen intencional que queremos lanzar, con nuestros mensajes y, sobre todo, con nuestros públicos. Debemos pararnos a pensar si nosotros estamos en disposición de utilizar ciertas herramientas correctamente. Por ejemplo, Twitter es conversación pura; si no estamos capacitados para conversar (es decir, para dar una respuesta inmediata y concisa a una pregunta concreta, que muchas veces suele ser delicada) quizá debamos preguntarnos si es conveniente utilizar esa herramienta. Las herramientas nos son, en sí, malas o buenas, las herramientas están bien o mal utilizadas, simplemente. Cada una es como una ficha de ajedrez: tiene ciertas particularidades que la hace efectiva en unos casos pero casi nulas en otros».
Y concluye: «También debemos reflexionar acerca de esto: no sólo es importante la visibilidad, que hablen de nosotros, generar conversación. Es importante que la visibilidad sea positiva, que hablen bien, que transmitamos notoriedad. Y esto se consigue con ayuda profesional y con tiempo».
Fuente: Página web madrimasd
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